Este año extendemos la invitación para aceptar el desafío interior y exterior de seguir sanando nuestras aguas y cantarles. Al estar compartiendo juntos un mundo tan cambiante como el Agua; en el que cada vez más se hace ineludible seguir buscando alternativas de innovación y elevar lo silenciado en los diferentes escenarios de los que social y geográficamente hacemos parte, nos asumimos como sujetos activos en su transformación a través de esta convocatoria anual.
Todos sabemos que el Agua genera cambios, da movimiento, ella misma es la consciencia que nos permite existir en este plano. Es la consciencia que nos habita, evolucionamos gracias a ella, por ella somos. Por tal motivo, lo que queremos una vez más, y a lo cual los estamos invitando es a que la acción de Cantoalagua siga incidiendo, inspirando, atrayendo la atención “es de decir, sublevando” a la gente, la sociedad, al mundo.
En este 2019 buscamos que nuestra acción, como parte de las agendas ambientales y los procesos de cambio, afecte positiva y constructivamente la relación que todos tenemos con el AGUA. La lógica es simple: Sublevamos en el interior, movemos consciencias en el exterior.
¿Que entendemos por sublevar? Elevar.
Elevar, en el sentido de ponernos en un nuevo estado del Ser. Reconocemos que en concordancia con la ley de origen, la naturaleza y el planeta “están bien” continúan en su ritmos natural; y consideramos que es nuestro comportamiento humano el que necesita sublevarse para ser mejores seres, para tener sociedades más justas con ellas mismas y el ambiente; para reconducir la civilización del Agua y los demás elementos en este llamado planeta azul; “para que renazca en su esencia en el eterno presente”.
Convocar a sublevarnos es invitar a que el espíritu se conecte con la dimensión del campo unificado, la consciencia que se refleja en la materia, la densidad que queremos transformar.
¿Queremos ríos limpios, protección de los páramos, lagos puros, agua descontaminada, mares sin plástico, belleza natural del paisaje, agua sin químicos-no envasada para nuestro consumo, desiertos con oasis, reservas protegidas, biodiversidad exuberante, territorios libres de fracking, vida en permanente evolución?
Podremos movilizarnos, elevar la voz, sentir que estamos indignados, en desacuerdo, más todo lo exterior es parte de lo que buscamos solucionar en el interior; por eso, consideramos necesario hacerlo con el corazón abierto, con la mente tranquila, para que la luz subleve, transforme, transmute, para que cada momento presente sea resultado de “elevarnos”, es decir, de soltar aquello que nos mantiene atados al miedo, a los patrones tóxicos.