
Querida Familia de Cantoalagua:
Con el corazón en reposo, el cuerpo en quietud y la mente en calma, agradecemos la disposición y acogida a la invitación la realizada a cantar al agua conectados virtual y energéticamente. Aunque en esta oportunidad no nos juntamos frente a las bellas y refrescantes fuentes naturales; lo hicimos desde la convicción de nuestras propias aguas interiores, junto a los seres que amamos, en los espacios donde nos encontramos permanentemente con lo que somos.
Recordando que somos gotas de agua en la gran corriente de la vida, hemos celebrado un canto más y nos hemos hemos dado otra oportunidad para honrarla en medio de nuevas circunstancias que determinan un escenario planetario distinto.
Este es un instante propicio para agradecer, para agradecer a la vida, al agua, al aire que respiramos y las demás manifestaciones de los elementos presentes en esta amada gaia. Es un momento especialmente significativo para agradecer por juntarnos a celebrar la existencia en torno y gracias al agua.
Desde el equipo semilla, agradecemos todas las expresiones artísticas, permaculturales, espirituales, visuales, sonoras, creativas, silenciosas, amorosas y cada uno de los rostros, perspectivas y acciones que desde sus hogares se hicieron presentes el pasado 22 de marzo.
Gracias por cada uno de sus corazones, intenciones, habilidades, memorias, valores, conexiones y tiempos puestos para nuestra causa común en este momento de hermanamiento global, donde la voz del agua en el silencio de las calles, la quietud de las casas y la descontaminación ambiental; requiere seguir siendo oída.
El mayor logro de este escenario internacional de acción por todas las aguas, es el de habernos reunido y manifestado. Sabemos que un día no basta, sabemos que es mucho más lo que el agua tiene para decirnos y nosotros desde ella al mundo.
Quedamos con muchas reflexiones después de nuestra primera y gran jornada virtual; entre muchas, una en la cual algunos participantes hicieron eco, es la de estar atentos y cuidar (además del cuerpo físico) al cuerpo emocional, puesto que las aguas internas expresan claramente el llamado urgente de la naturaleza para seguirlas armonizando; ya que poco serviría invitar cantar a todas las aguas del mundo cuando las aguas internas se revuelven o nos desbordan y el ego, la mente en desequilibrio y/o el cuerpo emocional se deja afectar y se le olvida estar en presencia, la presencia de sí mismo en su propio fluir como el agua... ¡Aunque sea algo propio de nuestra naturaleza, estamos en el momento exacto para revertirlo!
Todos aquí sabemos que la armonización del agua consiste en alinear sus moléculas por medio vibraciones y estímulos positivos poniéndola en equilibrio con el entorno; proceso que se realiza mediante la transmisión de energía, intenciones y pensamientos de amor, gratitud, respeto y cuidado; al mismo tiempo se nutre con la respiración consciente, notas musicales y frecuencias lumínicas, permitiendo así que en contacto con nuestro organismo y al beberla logre equilibrarnos en una elevada frecuencia, lo que nos lleva a la sensación de mejora física, mental y emocional.
Es el momento de aceptar aquello de “como es dentro es afuera” y trascender el reto de emerger a pesar de todas las turbulencias desde el océano interior y así re-descubrir la consciencia que empieza a florecer. En esta red que más de cantores, es de amantes del agua, continuemos auto recordándonoslo como un gran equipo que somos al servicio de la vida y con el trabajo de armonizar nuestras propias aguas; para que en coherencia sigamos conectando con nuestro corazón desde donde metafórica y realmente surge el canto. Lugar en el que simbólicamente reside la fuerza del amor, fundamental y decisiva en este momento de la historia humana.
Estamos irrefutable y colectivamente en un proceso de comprensión de lo que este momento significa en cuanto a la generación del nivel vibratorio elevado y necesario para este período, aunque esto signifique modificar y replantear la vida en muchos aspectos, pues aquello que se veía lejano, es ahora lo más próximo y lo que tenemos junto a nosotros es lo que hay. Sabemos sin detenernos en las causas que lo originan, que se ha generado una pausa en la actividad habitual de nuestras vidas invitándonos hacia el interior en todos los sentidos. Es un llamado planetario y contundente a vivir el presente, tal como el agua lo es en cada uno de sus estados!
Estamos atravesando grandes y globales cambios en todos los sentidos, cuerpos, niveles y dimensiones; el cambio anhelado está sucediendo ahora y quizá no de la manera en que lo pre configuramos. Sucede sencillamente en el interior de nuestras células, cuerpos, familias, casas. Sucede en nuestros pensamientos y sentimientos, elevando la frecuencia de las aguas… Quizás por ello, hoy podemos comprender mejor la fuerza de la unión, no somos individuos aislados, estamos interconectados por campos metamórficos de consciencia y en el diseño del misterio que nos creó, contamos dentro de nuestra esencia con "la gran onda portadora de la Vida"; la almacenadora y transmisora de información por excelencia, aquella que con su fuerza produce electricidad.
Dado que es necesario el re establecimiento del orden natural, de retornar al origen, de estar en unidad, tenemos ahora la oportunidad de auto demostrarnos en una gran y creciente ola (que se convierta en un tsunami al pensar, sentir y hablar desde el corazón); porque tenemos el poder de cambiar la estructura de la materia (tal como Masaru Emoto lo recordó) desde la energía del amor e integración que nos une en esta red que hermana todas las expresiones del Agua; amor asumido como la energía producida de una profunda convicción en algo que aparentemente es intangible y es nuestra propia capacidad de evolución humana. ¡Vamos por ello! ¡¡¡GRATITUD INFINITA!!! AMA - Cantoalagua Bogotá.